martes, 26 de agosto de 2008

Eternamente agradecidos


Así pienso que nos encontraremos la mayoría de sevillistas con este pequeño gran hombre que llegó a Nervion hace ya 8 temporadas. Multitud de recuerdos que se agolpan.


Llego como a él le gusta, sin hacer ruido. Un no habitual en el Mallorca de la primera división tuvo que mostrar sus habilidades en equipos como Hércules o Extremadura, antes de salir de nuevo de la isla rumbo a Sevilla.


Pronto nos ganó a todos con su coraje y entrega, un futbolista que poco antes de firmar con el Sevilla había salvado la vida cuando una grúa se le precipitaba sobre su coche, con la fortuna de que cayó al lado donde no se encontraba nuestro gran David Castedo.

Tras una mala temporada en el Levante, club del que se ha desvinculado , ahora se encuentra entrenando en solitario esperando ofertas para poder despedirse del fútbol profesional como merece. El Sporting de Gijón parecía muy interesado en su fichaje pero no acabó de concretarse.

No puedo olvidarme de una de las mayores injusticias de este país en lo futbolístico, y no es otra que David no haya sido internacional. No me explico como los seleccionadores miraban para otro lado y se olvidaban del mejor lateral que había en España. El grandioso Iñaki Saez dijo en tiempo que David era muy pequeñito, los buscaba más altos y más guapos. Lo gracioso de todo es quien dice esa barbaridad es un hombre que no levanta mas de metro y sesenta del suelo, y que casualmente era lateral en sus tiempos mozos.

Hace poco leía en internet unas preguntas a Luis Figo en la que le preguntaban quien ha sido el lateral más complicado a quien se enfrentó y de la liga destacaba "a uno chiquitito del Sevilla". Y no lo digo yo, lo dice uno que a pesar de ser un fantoche y un mercenario ejemplar , creo que sabe bastante bien de lo que va esto del fútbol.

David Castedo, 7 temporadas al servicio del Sevilla. 7 años dándole el protagonismo a los demás y haciendo su trabajo como el mejor. Mas de 200 partidos en rojiblanco llenos de pundonor, sacrificio y amor por unos colores.

En mi mente siempre estará el pequeño e inabordable David de las mejores tardes. Un señor dentro y fuera del campo. Ninguna palabra más alta que otra.

Otros tendrán mejores coches y casas, pero el siempre tendrá el reconocimiento y el recuerdo de una afición que no le olvida, y eso no se compra con dinero. Ojalá pronto se acaben sus entrenos en solitario y podamos despedirnos por última vez y que vuelva a retumbar su nombre por Nervión.

David Castedo o un ejemplo a seguir. Un caballero del fútbol. Desde este sitio si me lees por casualidad te mando un abrazo y un grito de aliento en estos momentos un poco más difíciles, pero tu quédate tranquilo que le podrás contar a los tuyos lo mucho que la gente te aprecia.

David Castedo Escudero por siempre uno de los nuestros.


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